La historia del paso de cebra contada para niños

El paso de cebra es un elemento muy importante en materia de educación vial para niños del que conocemos muy poco y, además, es bastante curioso. Líneas blancas pintadas sobre las carreteras en intervalos como un código de barras y que además tiene nombre de animal.

Y es que sin darnos cuenta estamos usando un elemento de la circulación con unas características muy peculiares, por lo que seguro que a más de uno le ha surgido la duda de dónde vienen estos pasos. Si quieres ser un buen peatón, no dudes en conocer un poco más sobre los pasos de cebra.

El origen del paso de cebra en Reino Unido

En muchas ocasiones no somos conscientes del origen de muchas de las cosas que nos rodean, son elementos que damos por sentado que están ahí y que apenas les prestamos atención, y precisamente por prestar atención fue por lo que se inició el invento de este paso de peatones.

La fecha exacta de su invento es 1951, pero sus inicios comenzarían unos pocos años antes, cuando George Charlesworth y sus colegas científicos observaban por la ventana el comportamiento de los vehículos y peatones.

Este equipo era el encargado del laboratorio de investigación de la carretera en el Reino Unido, y ya en 1949 comenzó a instalar el primer millar de pasos de cebra, los cuales fueron un éxito. Pero este éxito viene precedido de muchos fracasos, y es que otros intentaron establecer un punto por el que los peatones pudieran cruzar la carretera disminuyendo el riesgo.

Uno de los más conocidos y curiosos debido al uso que se le daría posteriormente, era una linterna naranja en ciertos puntos de la vía, pero desgraciadamente esto aumentó los accidentes, ya que los peatones cruzaban confiados pero los vehículos no paraban.

Tal fue el éxito de Charlesworth en los años 50 que fue nombrado director para el control del tráfico, y tal fue su fama que se le reclamó de otras ciudades del mundo y se le conoció como el Doctor Zebra.

Los inicios romanos

Pero antes de que el investigador británico decidiera que era buena idea tener un lugar fijo por el que los peatones pudieran pasar seguros, los romanos ya se le habían adelantado. Como en tantas otras cosas a lo largo de la Historia, durante el Imperio Romano tuvieron origen algunos de los inventos más imprescindibles de nuestro día a día, y tal es el caso del paso de peatones.

En algunas ciudades de la época romana se tiene constancia de que se usaban para regular el tránsito de peatones, aunque con un fin un poco distinto. El caso más claro nos lo dejó la ciudad italiana de Pompeya, muy cerca de Nápoles, donde hay vestigios de pasos de la época, algo diferentes a los actuales.

Los pasos romanos estaban hechos con piedras más o menos rectangulares que se alzaban del suelo, de manera que las ruedas de los carros podían pasar entre ellas. Entre sus objetivos estaban que los peatones pudiesen pasar por encima sin mojarse los pies con la lluvia y el barro que se creaba en la calzada.

Pasos de cebra curiosos

Algunos pasos de cebra se han hecho conocidos, bien por sus características, bien por algún suceso que les ha hecho saltar a la fama. Este es nuestro particular, y breve, salón de la fama de los pasos de cebra.

Abbey Road (Londres), el más famoso

Una fotografía fue suficiente para que este pequeño paso de cebra sea el más famoso del mundo, y es que si uno de los grupos más famosos de la historia se hace una foto pisando sus líneas blancas, es más que suficiente.

El 8 de agosto de 1969 cambiaría la vida para este paso ubicado en Londres. La fotografía más famosa de los Beatles fue usada como portada de su disco de nombre homónimo, y desde entonces, miles de personas se acercan al paso para imitar la icónica fotografía.

Un original paso de vaca en A Coruña (Galicia)

Estos curiosos pasos de peatones tienen una historia de reivindicación detrás. Esta curiosa iniciativa tiene como protagonista A Coruña, que modificó en 2018 uno de sus pasos de cebra más transitados para que fuese un paso de vaca: es decir, las líneas blancas se habían cambiado por pequeñas manchas que simulaban la piel de vaca. Detrás de la idea estaba una marca del sector lácteo de Galicia, que pretendía reivindicar la cultura rural y darle la importancia que se merecen sus ganaderos y pastos.

El más largo del mundo en Pontevedra

Y sin salir de Galicia hay que conocer otro paso de peatones: el paso más largo del mundo, y está situado en Cangas de Morrazo, en Pontevedra. Se trata de un paso de más de 40 metros de largo hecho en 2018 que tiene como intención fomentar y reivindicar la movilidad, un bonito gesto que además deja una estampa muy curiosa.

Paso de Shibuya (Japón), el más transitado del mundo

Este paso japonés tiene el honor de ser el más transitado del mundo. Realmente, se trata de cuatro pasos de cebra unidos en el famoso cruce de Shibuya. Para cruzarlos, los peatones tienen casi 50 segundos para cruzar en todas direcciones, y pasan la friolera de 3000 personas, lo que hace que al día sean un millón de personas las que lo hacen. Es una de las imágenes más icónicas debido a sus pasos de cebra en diagonal.

Poco hay que decir sobre la utilidad del paso de peatones más reconocido en nuestro día a día, pero ahora ya sabes que hasta existen pasos de cebra que son más famosos en muchas calles de muchas ciudades, y es que a pesar de ser algo que pisan millones de personas merecen un reconocimiento por la labor que hacen.